Una limosna por el amor de Dios
Posiblemente la composición maestra de uno de los mejores compositores de guitarra clásica, Agustín Barrios. La historia cuenta que escuchó a una anciana tocar a su puerta pidiendo limosna, diciendo «una limosna por el amor de Dios». El ritmo subyacente está destinado a imitar ese golpe. Ofrecido en anticipación a la próxima Cuaresma.