La Vía Dolorosa es una ruta sagrada en la Ciudad Vieja de Jerusalén que se cree sigue los pasos que Jesucristo recorrió durante su camino hacia la crucifixión. Es un importante lugar de peregrinación para los cristianos de todo el mundo.

La Vía Dolorosa tiene un total de 14 estaciones, cada una representando momentos específicos de la Pasión de Cristo. Estas estaciones están marcadas a lo largo de la ruta y las personas pueden recorrerlas siguiendo los pasos de Jesús. Algunas de las estaciones más conocidas incluyen la condena de Jesús, el encuentro con su madre, el encuentro con Simón de Cirene, la caída de Jesús, la crucifixión y la sepultura.

La ruta de la Vía Dolorosa abarca aproximadamente 1,5 kilómetros y atraviesa calles estrechas y empedradas de la Ciudad Vieja de Jerusalén. Durante el recorrido, los peregrinos siguen las estaciones, meditan y rezan, recordando los sufrimientos de Jesús durante su camino hacia el Calvario.

Cada viernes, un grupo de creyentes liderado por un fraile franciscano recorre la Vía Dolorosa en un evento llamado «El Viacrucis». Durante esta procesión, que está abierta a los fieles, se realiza una representación simbólica de los eventos de la Pasión de Cristo a lo largo de las diferentes estaciones.

Es importante destacar que la Vía Dolorosa también es un lugar turístico muy visitado en Jerusalén. Además de su significado religioso, la ruta ofrece una mirada fascinante a la historia y cultura de la Ciudad Vieja, con sus mercados, iglesias y sitios históricos que se encuentran a lo largo de la ruta.